Instalaciones Industriales

Las instalaciones eléctricas industriales son un “conjunto de circuitos eléctricos que conducen y distribuyen la corriente eléctrica desde un punto de origen (el servicio eléctrico) hasta la salida de este mismo”. Existen dos tipos de instalaciones eléctricas industriales: en función de su tensión, pueden ser de alta, media, baja o muy baja tensión; o según su uso, dependiendo de qué objetivo tienen y para qué vayan a ser empleadas.

A diferencia de las instalaciones eléctricas residenciales, las instalaciones eléctricas en industria cuentan con sistemas y máquinas de gran consumo con un funcionamiento trifásico, es decir, que está compuesto por una corriente alterna con tres fases que dividen la potencia de la instalación, por lo que se requiere de un dimensionamiento distinto. Debido a su envergadura y a los múltiples componentes y sistemas que las conforman, las instalaciones eléctricas industriales necesitan de unas garantías de seguridad y características a nivel técnico muy importantes. Es de suma importancia que las instalaciones eléctricas industriales estén correctamente protegidas frente a los diferentes agentes externos (ubicación de la instalación, cambios de temperatura, etc.), además de peligros como las sobrecargas o los cortocircuitos en el sistema. Este tipo de averías pueden dañar directamente la instalación realizada, los equipos y máquinas de la empresa industrial y a sus trabajadores.